Vístete linda
Éste podría considerarse como el inicio de un círculo virtuoso. Si te ves linda, te sientes bella y te levanta el ánimo. Y cuando tienes buen ánimo, tienes ganas de vestirte linda. Caso contrario es cuando el círculo vicioso trabaja en tu contra empezando por vestirte mal, lo sabes y cada vez te dan menos ganas de elegir tu guardarropa porque ya no tienes ánimo o desaparece el deseo de verte bien y como no tienes ánimo, te vistes cada vez peor. ¡Está en tí elegir el círculo virtuoso, el del bienestar, tómate el tiempo de elegir una indumentaria que no solamente te guste, sino que te encante! Tómate los minutos necesarios de ver que prenda combina con alguna otra y sobre todo contigo misma.