Finalmente embarazada
Si bien se trató de un proceso largo y lento, Ben pudo obtener lo que quería. Tras ello, él mismo se encargó de llamar al veterinario al cabo de una semana o quizá un poco menos para que se realizase una ecografía que pudiese determinar si Felicia estaba embazada… Y sí, finalmente lo estaba.
La yegua y su dueño estaban bien después de ser examinados. No obstante, las cosas dejarían de salir bien meses más tarde. Felicia no podía dormir tanto como antes y ya ni siquiera podía caminar con Ben por el establo, algo que él no entendía.